La vía "Maraya" a Horcados Rojos puede considerarse junto con "El Pilar de Nazaret" en las Coteras Rojas como las precursoras de un nuevo estilo de escalada que poco a poco fue desarrollándose por todo Picos de Europa y en especial en el entorno de Fuente Dé. La idea era a partir de ahora buscar los puntos débiles de las paredes más verticales consideradas hasta el momento como imposibles a no ser que se utilizasen un gran número de expansiones en la roca. Descubrir los puntos débiles de estas imponentes paredes era clave para poder progresar mediante la escalada en libre y los aperturistas se caracterizaban no solo por su gran nivel de escalada sino por su gran visión para encontrar las líneas adecuadas para progresar.
En esta aspecto "Maraya" en los Horcados Rojos" fue la primera y la más asequible de las muchas aperturas que vinieron después en esta pared y que son a día de hoy objetivo de muchos de los mejores escaladores de nuestro país.
Consiste en una escalada que no supera en ningún momento el 6a pero donde los largos son mantenidos y atléticos y la verticalidad se gana desde el primer metro. Todo esto unido a la gran calidad de esta roca abrasiva y el gran ambiente de esta pared hacen que esta ruta se haya convertido en una de las clásicas modernas más repetida y deseada de los Picos de Europa. Un vía ideal para probarse antes de intentar otras vías más largas como las de la Cara Oeste del Naranjo o la Sur de Peña Santa.
Un primer largo con un paso duro de entrada nos deja bajo un gran diedro. Escalar este diedro es una gozada ya que tiene mucho agarre y una roca excelente. Aquí la verticalidad ya no nos abandonará en todo el día. El tercer largo, el más bonito, evita los grandes desplomes superiores mediante una aérea travesía técnica de pies pero con una roca muy abrasiva que nos dará confianza. El cuarto largo es más sencillo pero más alpino por lo que no nos dejará relajarnos en exceso. Finalmente, llegaremos al diedro final, un largo muy atlético con mucho agarre y un gran ambiente bajo nuestros pies. Una vez en la cima, podemos regresar caminando o mediante un par de rapeles. Otra opción muy bonita si aún nos quedan fuerzas, es continuar andando unos 15 minutos hasta la base del Espolón Rojo de Santa Ana y escalar esta clásica sencilla pero preciosa hasta la cima Oeste de los Picos de Santa Ana.
FICHA TÉCNICA
DURACIÓN
DIFICULTAD
PRECIO
*Incluye 21% de IVA.